No corren buenos tiempos para la actriz británica Naomi Watts que pasó un calvario hace poco días al acudir al estreno de The Watcher. Al parecer corrió con el infortunio de verse casi desnuda ya que su vestido no aguantó la presión de las cámaras.
La actriz llevó un espectacular vestido de lentejuelas de una valiosa firma que ha quedado retratada. Una de los vestidos de su colección para este invierno. Se trata de un vestido metalizado, de tirantes. La espalda cuenta con unas aberturas, un diseño sexy a la vez que elegante y resultón.
Cuando llegó la hora de la sesión de fotos fue cuando de repente la cremallera del vestido de Naomi Watts se rompió, dejando al aire libre la zona del costado de la actriz, que supo solventarlo de manera eficiente y rápida con unos imperdibles negros para evitar que siguiera rompiéndose y no llamar la atención.
Una mujer que sabe muy bien cómo manejar este tipo de situaciones tal y como se vio aunque no por ello dejaba de ir a la moda pues cada vez son más habituales los modelitos donde más que tapar dejan ver todo el cuerpo de las mujeres. Fue justo lo que le ocurrió a ella pero reaccionó de forma elegante.
Y es que ante una situación similar muchas hubieran optado por salir corriendo pero ella aguantó el tipo de una forma que habla muy bien sobre su profesionalidad. Y que nadie se atreva a pensar que le sobran kilos pues a su edad sigue estando como nunca, su cuerpo y su sonrisa siguen siendo de diez.