No deja de ser curioso, que para poder reforzar el equipo, el FC Barcelona tenga que deshacerse de dos jugadores titulares que han hecho una buena temporada, en un equipo que ha ganado la liga española. Estos dos jugadores, Raphinha y Koundé, fueron fichados el verano pasado por 65 y 60 millones respectivamente, por lo que queda mucho por amortizar del fichaje en los dos casos.
El Barça necesita liberar masa salarial y se contemplan las ventas de Koundé y Raphinha
Con sus ventas se liberarían 50 millones de la masa salarial, algo fundamental para que el club azulgrana tenga margen para inscribir nuevos jugadores que vengan en condiciones ventajosas.
Se ha fichado a Íñigo Martínez que llega libre del Athletic Club, y también se pretende cerrar la llegada de un reciente campeón de la Champions, el turco Ilkay Gündogan, que parecía tener un acuerdo por tres años cerrado con el Barça, pero tras un final de temporada espectacular tiene varias ofertas importantes, entre ellas la de su propio equipo, Manchester City, y el jugador las está valorando. Eso sí, su esposa ha manifestado que la ciudad en la que le gustaría vivir es Barcelona, y eso puede servir de ayuda a Laporta para lograr su fichaje.
El Barça trata de salir de la regla del 40%, su objetivo es llegar a la 1/1, para eso debe cuadrar las cuentas
De ahí el interés en traspasar a dos jugadores que pueden tener un buen mercado. Raphinha tiene un buen cartel en la Premier tras su paso por el Leeds y su buena temporada con el conjunto culé.
Por su parte, Koundé es un defensa de primer nivel europeo que no tendría problema en fichar por un equipo top europeo.
Ansu Fati o Kessié son otras opciones que maneja el club para ser traspasados
Ambos jugadores tienen un salario elevado, de 12 millones brutos anuales, y además comportan una elevada amortización relativa a sus fichajes que computa en la masa salarial. Su traspaso sólo tiene un problema, y es que cuando aún está pendiente la amortización de ese jugador, es mucho más difícil generar beneficios con la operación. Es ahí donde entran Kessié, que llegó libre del Milán y Ansu Fati, que salió de la cantera, como dos buenas opciones de traspaso.
