Apenas hace tres meses que la cúpula de Mediaset era vuelta como un calcetín. El Consejo de Administración de Mediaset aprobaba por unanimidad nombrar a Alessandro Salem y a Massimo Musolino consejeros delegados, en sustitución de Paolo Vasile, y dotaba de funciones ejecutivas y editoriales en algunas áreas a su presidente, Borja Prado, toda una revolución.
Desde ese momento, Borja Prado ha intentado resucitar a Telecinco de la brutal crisis de audiencias que le persigue desde ya hace demasiado tiempo. Cancelación de programas, reestructuración de la parrilla, adelantar Supervivientes a costa de Pesadilla en el Paraíso y en parte también de La Isla de las Tentaciones, la instauración de un nuevo código ético y de un veto a diversos personajes televisivos, han sido algunos de los movimientos para intentar renacer al medio muerto.
Una remontada de esperanza
Sin embargo parece que por fin todos esos movimientos le están dando frutos gracias a uno de los buques insignia de la cadena, Supervivientes. El programa de supervivencia de famosos en Honduras parece que está remontando en las audiencias e incluso está marcando varios registros de liderazgo. Este jueves, el 'reality' ha conseguido liderar con un 17,7% de share y 1.695.000 de espectadores, una diferencia grande respecto a los datos del resto de programas de prime time, lo que supone una subida de 2,1 puntos. Se trata de la primera vez que la gala siguiente a un estreno crece desde la segunda edición de este reality show, emitida en 2001. Un éxito que da un respiro a Mediaset España en una época complicada en términos de audiencia.