Este viernes, María Patiño tuvo una tarde movida en 'Sálvame'. Su relación con Anabel Pantoja no pasa por su mejor momento, después de que afirmase que la sobrina de la tonadillera seguía enamorada de su exmarido, Omar Sánchez. María lo notó cuando las dos coincidieron en Fuerteventura, por la forma tan "pasional" en la que hablaba del canario.
Mientras la presentadora intentaba aclarar las cosas con su amiga, el programa se ha encargado de azuzar la polémica a través de Germán González, que preguntó a Pantoja sobre el asunto en los Premios Ídolo. Después de que Anabel desviase el tema, Patiño se ha mostrado molesta: "Estoy enfadada con el programa y con Germán. Esas preguntas...".
Si bien la de 'Socialité' quería solucionar el conflicto en privado, la dirección de 'Sálvame' le ha pedido que lo hiciese delante de las cámaras. Incluso se le ha encomendado una misión en contra de su voluntad: abandonar su puesto de trabajo para ir en búsqueda de la sobrina de Isabel Pantoja.
Finalmente, María Patiño ha conseguido contactar por teléfono con Anabel Pantoja. Eso sí, a pesar de la insistencia de David Valldeperas, la periodista no ha querido activar el altavoz y desvelar el contenido de la conversación. "María, por favor, pon el altavoz", le ha rogado Terelu Campos.
Tras finalizar la llamada, María se ha dirigido de nuevo bastante enfadada: "Ella ha pedido hablar conmigo de la manera en la que me lo ha pedido. He establecido una conversación absolutamente llena de luz con Anabel. Si no os gusta como trabajo, yo prometo que me quedo en mi casa", ha advertido la comunicadora, afirmando que le ha prometido a Anabel que no desvelaría lo que acababan de hablar.