Todo lo que rodea a Mediaset parece incertidumbre y tristeza. La audiencia ya no funciona como antes y programas tan clásicos como 'Sálvame' corren serio riesgo de extinción. Sí, JJ Vázquez ya no es ni mucho menos el rey de la parrilla televisiva.
Igual que tampoco lo es Belén Esteban. La 'princesa del pueblo' atraviesa una de sus peores circunstancias personales y laborales. Desde que se cayó en el plató haciendo una prueba, facturándose tibia y peroné, su vida ha dado un giro de 180 grados.
La rehabilitación no está saliendo como esperaba y sigue sin poder andar con normalidad. Los médicos ya no le aseguran al 100% que pueda recuperar la movilidad plena y eso le ha sumergido en un estado de depresión.
Tiempos difíciles
"Vuelve a estar decaída y desanimada. Le aterroriza no llegar a andar bien como en un principio le dijeron. Maldice aquel momento, cuando tuvo que pasar por aquella prueba, a pesar de que no quería. Aquel momento le ha cambiado la vida, tal vez para siempre, y no precisamente para bien", explican fuentes próximas a Belén Esteban a 'Informalia'.
Está coja y teme quedarse así el resto de sus días. Además, en Mediaset se está armando una buena desde el despido de Paolo Vasile. Nadie sabe lo que va a pasar en el futuro más cercano y hasta una intocable como Belén Esteban puede verse de patitas en la calle.