Cuando los equipos de fútbol pierden un partido, la mayoría de las veces buscan todo tipo de excusas para justificar la derrota. Si esto lo elevamos al nivel de los seguidores, se puede llegar a convertir en la búsqueda del más mínimo resquicio para explicar los malos resultados.
Esto mismo fue lo que aconteció tras las semifinales de la pasada Copa del Rey, entre el Real Madrid y el F.C. Barcelona. En el partido de vuelta, el club blanco pasó por encima del cuadro blaugrana endosándole un 0-4 en el Spotify Camp Nou, apeándolos de la final de copa.
Este resultado escoció y mucho entre los aficionados culés, que emprendieron una cruzada en las redes sociales acusando a los jugadores blancos de dopaje durante el partido. Una acusación muy grave que se sustentaba en unas imágenes de los jugadores de Ancelotti aspirando una sustancia impregnada en sus camisetas.
El antimadridismo ha vuelto a pinchar en hueso
La explicación es bien sencilla, y para nada dopaje, ni siquiera ilegal. Se trata de un truco que ha recuperado el preparador físico Pintus, y que incluso es un remedio para niños. Se trata de una crema utilizada para aliviar la congestión nasal, el Vicks VapoRub. El ungüento ayuda a respirar mejor al abrir las fosas nasales, y evidentemente su composición no es dopaje, ya que entre sus ingredientes sólo hay alcanfor, trementina, mentol, aceite de eucalipto, timol y aceite de nuez.
Este es un viejo truco de vestuario, que se dio a conocer cuando Patrick Vieira hace 20 años, lo usaba mientras jugaba en el Arsenal. Su propio entrenador, Arsene Wenger, lo explicó de nuevo hace poco, "Al principio llamaba mucha la atención y hasta se pensó que era algo ilegal, pero era algo muy sencillo... Un remedio casi para niños". Lo dicho, hay que buscar excusas para las derrotas, así duelen menos.