Un siglo después de la llegada de Mussolini al poder, en 1922, va a volver a gobernar la extrema derecha en Italia. Con Giorgia Meloni a la cabeza con un 26% de los votos, la alianza de centro-derecha se ha impuesto en unas elecciones en las que tan solo ha habido un 64% de participación.
Durante toda la campaña electoral, Rusia ha sido una de las protagonistas, siendo su propia embajada la que quisó participar directamente a través de la publicación de unas fotos de Vladimir Putin con Berlusconi, Salvini, Letta, Conte o Renzi.
Un viejo conocido de la política como Silvio Berlusconi será el contacto más directo del presidente ruso en el gobierno italiano. La relación entre ambos trasciende desde hace más de 20 años, incluso milanés llegó a decir que Putin era su ‘hermano pequeño’. Incluso el expresidente italiano llegó a decir hace unas semanas que la actuación del ruso en Ucrania estaba justificada, hecho que tuvo que descartar luego.
Salvini también ha mostrado su apoyo a Putin, llegando a estar en la frontera entre Rusia y Ucrania dos semanas antes de estallar la guerra con una camiseta con la cara del máximo mandatario ruso.
Quien no aparece en las fotos publicadas con Vladimir Putin es Giorgia Meloni, con la que no tiene gran relación aún. Sin embargo la posición antieuropeista de la italiana es un punto a favor a ojos del gobierno ruso. Ahora hay que esperar a ver cuál será la posición de los nuevos máximos mandatarios italianos respecto al papel que tiene que tener la Unión Europea en tierras ucranianas.