¿Quién dijo que el golf era aburrido? No hay más que ver un partido de Paige Spiranac, que fue nombrada hace unos meses la mujer más sexy del mundo por la revista 'Maxim'. Desde entonces su popularidad se ha disparado por las nubes.
A sus casi 30 años, la norteamericana se hizo famosa al participar en varios torneos de prestigio. Era imposible que pasase desapercibida con su físico y en cuestión de meses le siguen ya más de 3,5 millones de personas.
Todas las marcas quieren trabajar con ella para que publicite productos por su tirón mediático. Ya incluso ha convertido el golf en una actividad secundaria, pues se ha dado cuenta de que ingresa mucho más gracias a las redes sociales.
Directa al club de los millonarios
Se calcula que dispone de una fortuna que ronda los 4 millones de euros. Cantidad que no deja de crecer fruto de las publicaciones promocionadas y la asociación que ha firmado con empresas, tanto del mundo del golf, como de la moda.
"Si me hubieras dicho en el último año de universidad, que mi vida tomaría este camino, me habría reído en tu cara. Nunca esperé que sucediera nada de esto, pero estoy muy agradecida de que haya sucedido. Soy capaz de amar lo que soy y lo que hago a través de la creación de contenidos y de ser una influencer", escribió en uno de sus últimos post de Instagram. Paige Spiranac ya es una celebrity top en Estados Unidos.