Sin lugar a dudas, Ibai Llanos es todo un referente en el mundo streamer. Se ha convertido en un influencer y prácticamente es conocido por todo el mundo. Consiguió el salto a la fama durante la cuarentena por el COVID 19 gracias a una versión virtual de LaLiga. Contó con participantes de renombre y desde ahí hasta el momento se ha ganado la vida a través de sus directos en Twitch, sacándole partido así a sus redes sociales.
Asimismo, ha sabido rodearse de gente con ideas y emprendedoras. Han sido muchas las ideas que ha creado con Gerard Piqué. De hecho, ambos tienen un negocio en común, que es KOI, el equipo de eSports que ha dado como resultado eventos tan mediáticos como la Ballon World Cup o la compra de los derechos de la Ligue 1 y Copa América en Twitch. No obstante, en esta entrada no vamos a hablar de los grandes éxitos de Ibai, sino pretendemos que conozcas al streamer de una manera que a lo mejor no has hecho.
ibai chikito pic.twitter.com/SCSp6Emy4C
— Ibai (@IbaiLlanos) February 9, 2021
¿Sorprendido? La verdad es que la imagen es bastante llamativa, dado que a lo mejor no habías visto al Ibai niño. Esta foto, al igual que otras muchas, se puede observar en el documental "mi historia" en el que el vasco relató la manera en la que ha llegado a su situación actual.
Los inicios de Ibai Llanos
Desde que era un niño, se aficionó mucho a las retransmisiones deportivas. Concretamente, era un amante del programa Carrusel Deportivo, y le llamaba mucho la atención la manera en la que profesionales como Manolo Lama, Paco González o Pepe Domingo Castaño hacían radio cada fin de semana. Por aquel entonces, ni siquiera sabía que ser caster podría ser una profesión.
Como curiosidad y anécdota bastante bonita, en el colegio conoció a Ander que se convirtió en su mejor amigo y a la larga se convertiría en su compañero de retransmisiones.
Para finalizar, ha contado en algunas ocasiones que la crisis económica de 2008 fue un duro golpe para su familia. Provocó que tuvieran problemas económicos y trajo consigo el divorcio de sus padres. Este, en lugar de refugiarse en el alcohol o en las drogas, encontró una vía de escape en los videojuegos, como ‘Call of Duty Modern Warfare 2’, y poco a poco también en la narración de partidas. A partir de ahí, el resto es historia.