La separación entre Mario Vargas Llosa e Isabel Preysler ha ocupado el foco en el mundo del corazón durante la última semana. Lo cierto es que la noticia ha sido impactante y es que nadie se esperaba que el escritor y la socialité pusieran punto final a su relación después de ocho años.
Estos últimos días puso rumbo a París para pasar unos días de desconexión total y absoluta. Sin embargo, a la vuelta a la capital de España se le vio al llegar a su piso del centro. Asimismo, y una vez "cazado" no dudó en hablar justo cuando su nombre está en boca de todos.
El ganador del premio Nobel de Literatura del año 2010 no dudó en manifestarse al respecto y por ello trasladó su opinión a todo lo que había acontecido en los últimos días: "No es verdad. No son ciertos, los motivos de la ruptura que se están diciendo no existen", aseguró.
Intentó pasar desapercibido
En todo momento, pretendió pasar de incógnito. Así lo deja ver su gorra y su ropa ultra oscura. No obstante, no pasó desapercibido y una vez fue descubierto tuvo palabras para los medios: "Lo único que quiero es confirmar la entrevista que ha dado Isabel", expuso.
Se paró con los periodistas, pero no quiso dar más detalles. Optó por guardar silencio al preguntarle si es cierto que quiere volver con su mujer. "Yo me encuentro muy bien, me encuentro muy bien. Acabo de pasar un día en París", respondió a uno de los presentes antes de irse a su casa.