Tras el nacimiento la pasada semana de la nieta de Ana Obregón a través de la gestación subrogada, muchas han sido las críticas que ha recibido la actriz. La niña es hija de su hijo Aless fallecido en mayo de 2020, que congeló su esperma durante su larga enfermedad para poder ser padre.
La polémica continúa, se pone en entredicho el hecho de ser madre, padre o abuela a través de un vientre de alquiler. Algo que parece no afectarle a Ana Obregón que se muestra tranquila y feliz con el proceso. Aunque queda un último trámite, inscribir a su nieta como su hija en España, pero depende de la decisión de un cónsul.
La prensa extranjera también se ha hecho eco de la noticia: “Ahora la ciencia incorpora tragedia y telenovela, proponiendo un escenario distópico. Lo que piensa la mujer que dio a luz a la niña no lo conocemos, ni lo que pensará la niña cuando llegue a la edad de la razón (aunque uno se lo puede imaginar)”.
“Nos tenemos que conformar con lo que piensan el difunto Aless y su madre Ana: él quería un hijo aún muerto, y ella una hija que se pareciera a su hijo muerto. Mirándolo a contraluz, puede incluso parecer una historia de amor. Entonces, ¿por qué deja un regusto indefinible en el interior? Admito que no puedo ponerle un nombre a mi malestar. Sólo puedo compartirlo con el lector. Al no encontrar respuestas, me permito el lujo de una pregunta ¿todos los deseos son realmente derechos?”, escribía Massimo Gramellini, columnista del Corriere della Sera italiano.
En la BBC británica también han hablado sobre este caso. “La revelación inicial de Ana Obregón de que había pagado por la maternidad subrogada en EEUU provocó la ira de los ministros del gobierno de izquierdas y provocó un debate nacional” apuntaron desde la cadena inglesa. El Telegraph se afirmaba: “Socialité vinculada a David Beckham genera debate sobre la subrogación por su bebé recién nacido”. Este caso también ha provocado reacciones en Francia o EEUU.