El portero español de PSG Sergio Rico, sufrió un accidente el pasado domingo 28 de mayo en la Romería de la Virgen del Rocío, cuando fue golpeado por un caballo en la cabeza, lo que le provocó un traumatismo craneoencefálico grave que le mantenía en la UCI del Hospital Virgen del Rocío, con sedación y monitorizado desde entonces.
Su mujer comunica buenas noticias
El calvario que está pasando el jugador y su familia, parece que puede estar llegando a su fin. Y es que tras 22 días en coma inducido, los médicos han decidido ir retirando poco a poco la sedación. Su mujer, la influencer Alba Silva, comentó hace unos días que su marido “va dando pasitos para adelante” y que ya “ven la luz gracias al hospital y al personal sanitario”.
Este lunes se ha sabido a través de Alba que el jugador está consciente, y aunque no puede todavía hablar, debido a los daños causados por la entubación en las cuerdas vocales, ha conseguido comunicarse con sus familiares por signos, “desde el principio sabía que iba a salir adelante, porque es un campeón”, comentaba su mujer.
El proceso es delicado, no en vano hace unos días los médicos intentaron quitarle la sedación y debido a los problemas que surgieron, tuvieron que volver a inducirle el coma. En esta ocasión han pasado los días y el portero sigue estable. Lo que ha elevado el estado de ánimo de la familia y de su mujer, "Estoy más alegre, es imposible esconderlo. Solo tengo fe y paciencia", decía a las puertas del hospital el miércoles.
El futbolista es joven y con un gran estado de salud previo, por lo que son optimistas con la total recuperación. La gravedad de las lesiones dicta tener mucha precaución en su vuelta a la normalidad, no en vano, cuando un paciente ha estado en coma, su recuperación puede acarrear secuelas que afecten a la movilidad, al habla o a su alimentación, incluso un deterioro cognitivo. Desde aquí deseamos que Sergio se recupere completamente para poder estar con su familia y sus seres queridos en plenitud de condiciones.