El hecho de ser padre o madre condiciona la vida. Y si no que se lo digan a Rafael Nada. Bien es cierto, que es uno de los pasos más bonitos que se pueden dar en la vida de un ser humano, pero es una fase en el que tu día a día cambia por completo
Esto ocurre aunque seas el mejor deportista español de la historia y te llames Rafa Nadal. Bien es cierto, que aún no piensa en retirarse a sus 36 años, está empezando a invertir todas las ganancias que ha generado a lo largo de su carrera, que según 'Forbes' son más de 110 millones de euros.
Todo hace indicar que la nueva aventura se llama Zel, que es una cadena hotelera que pondrá en marcha de la mano del grupo Meliá. No es un sector nuevo para él: ya había invertido en un complejo hotelero en el Caribe mexicano y en restaurantes por todo el mundo.
"Soy un padre como cualquier otro"
Actualmente, lo que más satisfacción le produce a Rafa Nadal es su faceta persona. El tenista, que ya lleva tres años casado con Mery Perelló, la mujer de la que sigue enamoradísimo y que le ha hecho papá de su primer hijo, Rafa Júnior, que el 8 de enero cumplirá 3 meses. "Soy un padre como todos los demás", asegura el de Manacor.
Además, va a estrenar su casa durante el próximo verano, que es un espectacular chalet en Porto Cristo, una de las zonas más privilegiadas de Manacor. Dispone de tres salones, varias habitaciones, chimeneas, desván y garaje y otras construcciones a lo largo del terreno y cuenta con unas espectaculares vistas al mar. Por supuesto tendrá un gimnasio, en el que entrenará para seguir a punto.