La cantante británica Amy Winehouse, fue encontrada muerta en su apartamento del norte de Londres por su guardaespaldas el pasado 23 de julio de 2011, con tan solo 27 años. Una noticia inesperada que dejaba a la música sin una de sus voces más representativas y originales de los últimos años. Saltó a la fama en el año 2006 con el single Rehab, una canción que alcanzó el primer puesto de las listas de éxitos de las radios de todo el mundo. Amy estuvo siempre rodeada de polémica y escándalos por sus adicciones, las mismas que la llevaron a cancelar numerosos conciertos y a ingresar en varios centros de rehabilitación en diferentes ocasiones.
Su guardaespaldas la encontró sin vida, se dio cuenta que estaba muerta cuando intentó despertarla por segunda vez en el día, poco después de las 3 de la tarde. En el piso de la habitación había tres botellas de vodka vacías.
El día anterior a su muerte, Amy había estado bebiendo, escuchando música y mirando la televisión hasta las 2 de la mañana, según el relato del hombre. Años más tarde reabrieron la causa y volvieron a investigar todo desde cero. La conclusión fue la misma, aunque su familia alega que la bulimia también fue causante de su trágico final.
Causas oficiales de su muerte
Tres meses después de que la encontraran en su apartamento sin vida, se conocieron las causas oficiales del fallecimiento de la cantante Amy Winehouse. La jueza que instruyó el caso, Suzanne Greenaway, anunció que la artista murió “de forma accidental” a causa de la ingesta de alcohol. Tras los análisis practicados, no se encontraron sustancias ilegales en su cuerpo, pero sí una cantidad elevada de alcohol lo que le habría provocado un coma, “intoxicación etílica”. La letrada indicó que Winehouse sobrepasaba en cinco veces la cantidad legal permitida en Inglaterra y que, durante la investigación, se encontraron tres botellas de vodka en su habitación.
Durante el procedimiento judicial, la doctora de Amy, Christina Romete, había explicado que había vuelto a caer en la bebida después de un período de abstinencia. Los padres de la intérprete estuvieron también presentes en la sala durante la lectura de las conclusiones de la investigación y, con gesto triste, escucharon el resultado. El portavoz de la familia Chris Goodman dijo que estaban "contentos de saber finalmente lo que le ocurrió".