Marta Fernández, mujer de Jaime Martínez-Bordiú, revolucionó Marbella el verano anterior con Aüa, un chiringuito a pie de playa entre cuyos clientes se encontraban aristócratas, artistas e incluso jeques árabes. Ahora esta empresaria gallega se ha propuesto reeditar los éxitos con un nuevo proyecto: Truhan, una discoteca para mayores de 40 en Madrid que lleva abierta desde primeros de año.
Un local a medida
Un local de copas semiclandestino en Chamberí donde predomina el color naranja, suena música de los años 80 y 90, flamenco en directo los jueves y las paredes están llenas de vinilos con letras de Julio Iglesias –un truhan y un señor–.
“Es un bar de copas acogedor que está enfocado a un público al que yo llamo silver economy, esa gente que dice que por las noches ya no sale; pero en realidad lo que pasa es que a partir de cierta edad no sabes muy bien dónde ir, en las discotecas todo el mundo demasiado joven y no encuentras tu sitio o tu ambiente”, explica la empresaria en la revista Look.
“Tiene capacidad como para 150 personas. Quiero generar un ambiente privado. Gente conocida, amigos, que tú llegues y, aunque no hayas quedado con gente, te encuentres a tus amigos”, explicaba en otra entrevista a Vanitatis. “Sobre todo, quería huir de los típicos reservados de siempre y que, en lugar de estar cada grupo en su mesa, la gente pudiera mezclarse. Por supuesto también se puede estar de pie y bailar”, continúa.
“Te diría que Truhan, incluso, es como una continuación de mi casa donde recibo a mis amigos, así lo siento. Un poco como una fiesta privada donde todos tenemos algo en común. Me gusta mucho dar fiestas en casa. De hecho, desde hace años mis amigos de manera cariñosa me llaman Lady Confeti porque me gusta mucho estar con la gente y dar fiestas, así que Truhan es mi local perfecto.”