Para Gonzalo Montiel no es todo alegría y diversión: el argentino deberá rendir cuentas ante la justicia

El campeón del mundo Gonzalo Montiel, debe rendir cuentas ante la justicia argentina

Gonzalo Montiel debe rendir ante la justicia
Gonzalo Montiel debe rendir ante la justicia

El defensa argentino Gonzalo Montiel ha tenido un año espectacular. La diosa fortuna quiso que fuera el protagonista al lanzar dos penaltis decisivos: el que le dio el Mundial de Fútbol de Qatar a la selección Argentina frente a la Francia de Mbappé el 18 de diciembre, y el que le dio el séptimo título de la Europa League a su club, el Sevilla ante la Roma de José Mourihno el pasado 31 de mayo en Budapest.

Gonzalo Montiel imputado ante la justicia
Gonzalo Montiel imputado ante la justicia

 

Debe rendir cuentas para aclarar lo sucedido

 

Sin embargo, no todo son buenas noticias para el argentino. Ya que ha sido notificado por la justicia de Argentina de su imputación por un delito de abusos sexuales con agravante. La denuncia fue interpuesta por una joven el pasado mes de marzo ante la justicia del país sudamericano, por unos hechos que se produjeron el 1 de enero de 2019 en la vivienda del jugador en Buenos Aires.

El argentino ha aprovechado sus vacaciones para acudir voluntariamente al juzgado. El pasado jueves 15 de junio se presentó en la Unidad Funcional de Violencia Familiar y de Género Número 3 de La Matanza, donde declaró y tomó conocimiento de sus derechos como imputado.

La versión de la denunciante habla que durante la celebración del cumpleaños del jugador en su casa, la joven tomó “dos tragos” antes de desmayarse siendo Montiel la última persona que vio. A la mañana siguiente, apareció “tirada en la entrada de la casa con hematomas, llena de barro, con toda la ropa desacomodada y con la hermana de Gonzalo gritándome 'no te metas con mi hermano, no lo nombres, porque te voy a matar'”, ha explicado el periodista Gustavo Grabia.

Por su parte Montiel reconoció conocer a la denunciante y haber tenido “relaciones sexuales consentidas” con ella meses atrás. En un momento de la fiesta el jugador fue a llevar a varios invitados a sus casas, y al regresar encontró todo el mundo fuera. “Mi mamá y mis amigos me empiezan a contar que C. gritaba enojada y decía que todo era mi culpa porque yo no la había cuidado. Yo no entendía a qué se refería”, ha recordado. “Me dijeron que Alexis (al que acusan de ser el presunto violador) se la había llevado a su casa y que antes habían estado en el coche de mi papá que estaba estacionado dentro de la casa”, agregó antes de confesar que no conocía a ese tal Alexis. Una historia complicada que no ha hecho nada más que comenzar.