Cuando los futbolistas son noticia más allá de los terrenos de juego no suele ser buena señal. Este es el caso de un ex jugador de LaLiga, en concreto del Sevilla F.C., el holandés Quincy Promes, que ha sido noticia tras dar a conocerse una sentencia judicial en su contra.
Los motivos de la sentencia
Según ha desvelado ESPN, el jugador ha sido condenado a 18 meses de prisión. El motivo, haber apuñalado a un primo suyo en la rodilla en julio del año 2020. El futbolista fue detenido en diciembre de ese mismo año y, tras una grabación de una llamada en la que Promes se inculpaba, el tribunal ha dado por demostrado que el neerlandés es culpable de los hechos, pero no de intento de asesinato ni de homicidio involuntario.
El incidente habría ocurrido durante una celebración familiar, en un almacén propiedad de Promes localizado en Abcoude, un pequeño pueblo a catorce kilómetros de Ámsterdam, tras una discusión por un collar robado. Aquella acción causó a la víctima lesiones graves y problemas para caminar, de los que todavía no se ha recuperado plenamente, así como trastorno por estrés postraumático.
Además, Promes no se presentó en el tribunal de Holanda, hecho que fue catalogado de 'muy grave' por el juez, a lo que se sumó que no presentó ningún tipo de arrepentimiento, lo que hubiese disminuido la pena en seis meses. El jugador, que deberá pagar 7.000 euros para compensar a la víctima, estaría pendiente de otra investigación en los Países Bajos por un presunto delito de tráfico de drogas, donde se sospecha que estuvo involucrado en dos envíos de cocaína a los Países Bajos o Bélgica en 2020. Este hecho y que Rusia no tenga tratado de extradición harán más que probable que el jugador no acuda a su país a cumplir la condena.
El ex internacional holandés, de 31 años, se dio a conocer en el Twente antes de vivir un primer exilio en el Spartak Moscú (2014-2018). Luego jugaría en el Sevilla F.C. en la 2018-19, sin pena ni gloria, por lo que año siguiente ficharía por el Ajax de Amsterdam. Desde 2021 se encuentra en Moscú y tiene contrato con el Spartak hasta junio de 2024.